El secreto para una buena comunicación de pareja
Para establecer una relación sentimental sana, lo más importante es tener una buena comunicación de pareja. En este sentido, cabe destacar que la comunicación va más allá de si se habla o no se habla, o de cuanto se habla. Tiene más que ver con lo que se dice y cómo se dice.
¿Quieres conocer el secreto para una buena comunicación de pareja? En este artículo te explicamos todo lo que debes saber sobre este tema.
¿Cuáles son los errores más comunes en la comunicación de pareja?
La mayoría de los errores que se suelen cometer en la comunicación de pareja tienen que ver con no saber expresarse adecuadamente, por las faltas de respeto hacia uno mismo o hacia la otra persona. Entre los diferentes errores se pueden encontrar:
- Imponer nuestro criterio creyendo que nuestro punto de vista es mejor que el de nuestro compañero o compañera.
- Expresar defectos y quejas de la pareja con frecuencia, en ocasiones de forma exagerada.
- Querer que la otra persona sea como deseamos.
- Mostrar poco interés por los puntos de vista o creencias de nuestra pareja.
- No permitir que nuestra pareja se exprese.
- Dar por hecho lo el otro va a decir e interrumpirlo constantemente.
- Manipular al otro para lograr lo que deseamos.
- Dar la razón aunque no estemos de acuerdo.
El resultado de pautas erróneas de comunicación de pareja puede debilitar la relación, hasta el punto de llegar a la ruptura. Por eso es importante que prestemos atención a la forma y el modo que tenemos de comunicarnos con nuestro ser querido.
Claves básicas para una buena comunicación de pareja
Antes de compartirte pautas específicas que puedes poner en práctica en el día a día con tu pareja, queremos resaltar algunos aspectos básicos que deben estar presentes. Incidir en estas áreas ayudará a reducir conflictos y a mejorar la satisfacción de ambos.
Escucha activa
No puede haber comunicación sin escucha, y sin embargo es un aspecto que muchas personas todavía no dominan. Escuchar no significa oír, estar a la defensiva y pensar contraargumentos mientras el otro habla. Al contrario, significa prestar atención para tratar de comprender, para empatizar, para validar lo que la pareja siente en cada momento.
Autocontrol emocional
Gestionar nuestras propias emociones es fundamental para evitar conflictos y malentendidos. Una máxima de la buena comunicación en pareja es que las faltas de respeto no tienen cabida nunca, no importa cuán enfadados estemos. Así, habremos de ser responsables de nosotros mismos, contar hasta 10, respirar o incluso alejarnos por un momento y posponer la conversación si es necesario.
Igualmente, cuando sea el otro quien se vea desbordado por sus emociones, es importante que sepamos no tomarnos de forma personal sus palabras y actitudes y mantener la calma para evitar que la discusión escale rápidamente.
Humildad
Ser capaces de reflexionar y reconocer los propios errores ayuda a evitar numerosos conflictos de pareja. Esta humildad le muestra al otro cuánto nos importa y la disposición que tenemos para mejorar la situación de ambos. Incluso, en ocasiones no habrá que disculparse en sí por lo que se ha hecho, sino por cómo hemos hecho sentir al otro (aunque haya sido sin intención). Este es un ejercicio sumamente positivo.
Mentalidad de equipo
Ambos miembros de la pareja han de tener siempre presente que son un equipo, que trabajan juntos por un proyecto de vida común. Y es que muchas veces percibimos al otro como el enemigo, cuando en realidad en realidad es nuestro compañero. Evita las luchas de poder y opta por la negociación y la cooperación.
Interés genuino en el otro
Una buena comunicación no solo debe aplicarse cuando existe una discrepancia entre ambos, sino que ha de ponerse en práctica cada día. Por esto, busca momentos cotidianos para compartir con tu pareja y dedicarle toda tu atención sin distracciones. Realiza preguntas abiertas que le permitan explayarse, interésate tanto por su día a día como por sus sueños, metas y miedos. Conversar frecuentemente ayuda a construir la intimidad y a forjar un vínculo solido.
La asertividad como clave para la comunicación de pareja
Para comunicarse correctamente con la pareja, es importante ser asertivos. La asertividad no es más que una forma de expresión mediante la que se busca el respeto hacia uno mismo y hacia los demás. Así, según Alberti, este concepto se puede definir como:
“Eso conjunto de conductas, emitidas por una persona en un contexto interpersonal, que expresa los sentimientos, actitudes, deseos, opiniones o derechos de esta persona de un modo directo, firme y honesto, respetando al mismo tiempo los sentimientos, actitudes, deseos, opiniones y derechos de la otra persona.”
Practicar la asertividad nos ayudará a expresar nuestras necesidades en la relación de pareja, así como entender las de nuestro compañero. Ser asertivos nutrirá nuestra relación permitiéndonos expresar nuestro punto de vista y mejorando nuestra comunicación de pareja.
¿Cómo podría ser más asertivo?
1. Expresa tu aprecio por sus cualidades
Lo más probable es que aprecies ciertas cualidades o acciones de tu pareja (algo de su aspecto, de su carácter, de su personalidad, algo que dice o que hace, etc.)
Expresar verbalmente o de otra forma lo que apreciamos de nuestra pareja es bueno para ambos, ya que los dos lograrán sentirse mejor.
2. Acepta las muestras de afecto y los cumplidos
También es posible que tu pareja exprese su aprecio por ti. No dudes de su sinceridad, el hecho de que tú no lo creas, no quiere decir que la otra persona no lo piense. Acepta las muestras de afecto y los cumplidos con naturalidad, un simple “gracias” es suficiente.
Saber aceptar los cumplidos es un punto importante ya que si los despreciamos podremos condicionar a nuestra pareja y que a raíz de ahí no los vuelva a hacer en el futuro.
3. Sé capaz de decir “no”
Ten en cuenta que la responsabilidad de decir “no” es solamente tuya. No te dejes llevar por las presiones u otros motivos y actúa en consecuencia a tus pensamientos.
Decir “sí” cuando quieres decir “no”, no es sincero y hiere tus sentimientos. Estás en tu derecho de rechazar peticiones sin sentirte culpable o egoísta.
4. Explica lo que piensas o cómo te sientes
Di claramente lo que piensas o cómo te sientes, sea positivo o negativo, pero siempre desde el respeto hacia el otro. No hay mejor manera de que tu pareja te entienda que mostrando tus emociones .
No des por sentado que tu pareja sabrá cómo te sientes, por mucho tiempo que haga que os conozcáis. Con los años podemos comprender y entender al otro, pero si queremos que sepa lo que nos pasa, lo mejor es decirlo sin esperar que la otra persona lo infiera .
5. Cuidado con las acusaciones
Es muy fácil dejarse llevar por la ira y culpar a nuestra pareja de lo mal que nos sentimos. Así que, para evitar este error en la comunicación de pareja y enfrentamientos que no llevan a ningún lado, lo mejor es:
- Hacer preguntas en vez de acusaciones. Como podría ser: ¿Me estás escuchando?, en vez de acusar directamente y decir: ¡Otra vez no me estás escuchando!
- Comentar lo que hace la pareja sin calificarla. Por ejemplo: Me he fijado que últimamente te olvidas la ropa tirada en la cama después de cambiarte. En vez de: Eres un desastre, cada vez que te cambias dejas el cuarto empantanado.
- Evitar las generalizaciones como siempre o nunca. Por ejemplo es mejor decir: Últimamente no estás sacando la basura. A decir: Nunca sacas la basura.
6. Usar en nuestra conversación términos asertivos
Pienso, siento, hagamos, quiero, qué piensas, qué te parece, cómo podemos resolver esto, me gustaría, etc. Existen múltiples expresiones y formas asertivas que podemos emplear en nuestras conversaciones para crear un clima más agradable.
Por último, recuerda que mantener una comunicación asertiva con tu pareja no te garantiza la ausencia de discusiones y problemas , pero sí que facilita una comprensión y un respeto mutuo que se irá forjando poco a poco. Siempre tendrás esta opción a mano. Solo tienes que elegirlo.
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- Altman, I., & Taylor, D. A. (1973). Social Penetration: The development of interpersonal relationships. New York: Hotl, Rinehart & Winston.
- De la Plaza, J. (2009). Inteligencia asertiva. Zig-Zag.